Mirlo común

(Turdus merula)

"Common blackbird"
"Melro-preto"

Orden: Passeriformes                                         Familia: Turdidae 

OBSERVACIÓN:

Este ave puede ser observada con gran facilidad a lo largo de todo el parque, así como en toda la ciudad de Cáceres,  por donde es imposible pasear sin visualizar fácilmente ejemplares de ambos sexos si prestamos la atención suficiente.

DESCRIPCIÓN:

El mirlo común es un ave de tamaño medio de la familia de los túrdidos. Se trata de una especie con dimorfismo sexual, donde el macho presenta un plumaje de color negro muy intenso, contrastado con un pico y un anillo ocular de un vivo color anaranjado. En cambio, la hembra se diferencia del mismo por presentar un plumaje marrón oscuro y un pico y un anillo ocular de un tono más amarillento. Los individuos más jóvenes presentan un aspecto similar al de las hembras, aunque el plumaje es moteado. Suelen tener este aspecto hasta la primera muda, la cual tiene lugar, por lo general, entre los meses de agosto y octubre. Ambos sexos muestran una cola larga y una pose muy erguida y elegante, y se desplazan dando pequeños saltitos.

Mirlo común hembra

Mirlo común macho

HÁBITAT:

Podemos encontrarlos en una inmensa variedad de hábitats: áreas forestales, mosaicos agrícolas, formaciones de matorral, humedales, y parques y áreas ajardinadas en el interior de núcleos urbanos, donde es fácil observarlos posados en las ramas de los árboles, caminando en busca de comida por el suelo o bebiendo de alguna fuente presente en el parque.

ALIMENTACIÓN:

Es una especie omnívora. Se alimenta principalmente de lombrices, de insectos, de frutos y de semillas de todo tipo, dependiendo de la época del año. Cuando consiguen cazar alguna lombriz, normalmente durante la primavera, éstos las agarran fuertemente con el pico y a continuación las golpean contra el suelo, tras lo cual las ingieren rápidamente.

REPRODUCCIÓN:

El periodo de reproducción comprende los meses desde marzo hasta julio. Durante el cortejo, el macho realiza una serie de desplazamientos oblicuos y movimientos de la cabeza, unidos a un canto particular. A lo largo de todo el ritual la hembra permanece inmóvil, hasta que, finalmente, levanta la cabeza y eleva la cola para indicarle al macho que le está dando permiso para comenzar con el apareamiento.

Se trata de una especie monógama, es decir, una vez que se forma la pareja, ambos permanecen fieles hasta la muerte de uno de los individuos. Sin embargo, existen algunas excepciones en las que se producen separaciones de la pareja tras una temporada de cría con un bajo éxito reproductivo.

La puesta suele constar de 2 a 6 huevos de color azulado y aspecto moteado pardo-rojizo. La hembra los incuba durante aproximadamente unas 2 semanas, y más tarde, las crías permanecen en el nido hasta alrededor de los 13 días de edad, momento a partir del cual comienzan a aprender a volar. Hasta ese momento, las crías son alimentadas y cuidadas por ambos progenitores. 

Ejemplar juvenil

NIDIFICACIÓN:

La hembra es la principal encargada en la construcción del nido aunque cuenta con la ayuda del macho. Son construidos en sitios muy variados, aunque lo más común es encontrarlos en el suelo o entre las ramas de los árboles, pero generalmente no a más de 3 metros de altura. Más raramente podemos verlos en agujeros de muros u otras estructuras.

Los nidos tienen forma de taza y son construidos a partir de pasto seco, arcilla y pequeñas hojas.

CANTO:

El canto es un gorjeo no repetitivo, aflautado y melodioso. Consiste en una larga sucesión de estrofas breves y variadas, con un típico final agudo. Es una de las aves que más tempranamente comienzan a cantar, a veces ya desde finales del invierno.

Presentan diversos tipos de canto según el motivo del mismo: para establecer el territorio por parte del macho, como señal de alarma ante posibles depredadores, o durante la época de reproducción.

Mirlo adulto macho

MIGRACIONES:

Aunque las poblaciones ibéricas son mayoritariamente sedentarias, con movimientos locales o regionales; éstas vuelan al sur de septiembre a noviembre, y regresan de marzo a abril.

AMENAZAS Y CONSERVACIÓN:

Se trata de un ave abundante y ampliamente distribuida por toda España. No padece factores de amenaza evidentes, aunque en determinadas zonas puede hallarse sometida a la presión de la caza, ya que en algunas comunidades está considerada una especie cinegética.